Estimada
Sra. Directora:
Por
medio de esta nota quería solicitar una publicación
perteneciente a la Fuerza Aérea Argentina, con motivo del pasado
día 1º de mayo, cuando celebramos el "Bautismo de Fuego de
la Fuerza Aérea Argentina" en la Plaza "Aviadores de
Malvinas", del Barrio Aviación, próxima al Aeropuerto Don
Torcuato. Allí, el Sr. Jorge Páez, miembro de la Comisión de
Homenaje a los combatientes del conflicto del Atlántico
Sur, organizó junto a otros vecinos una ceremonia muy emotiva,
con la participación de varios colegios, integrantes de FF.SS. y
FF.AA., autoridades municipales, Bomberos Voluntarios, y mucho
público presente. Al respecto, sin extenderme mucho más, le
transcribo el texto a ser publicado.
Muchas
gracias por todo.
Vicecomodoro
Mariano
Manuel Aguirre
Jefe
Aeropuerto Don Torcuato
El
día 1º de mayo la Fuerza Aérea Argentina conmemora el 22º
aniversario de la primera acción en combate durante el conflicto
bélico del Atlántico Sur. Convocada para la defensa de la
integridad territorial de nuestra Nación y ante la
superioridad de un poderoso adversario, mundialmente reconocido,
fue el contexto donde la Aeronáutica Argentina desplegó
estrategias operacionales distinguidas por las fuerzas armadas de
varios países.
Los
hechos pasaron a conformar la historia de la Institución, y la
aviación militar pasó a ser parte integrante de la cultura
argentina a partir del año 1982. Las películas, los libros y la
prensa mundial, pusieron el heroísmo de los hombres y las proezas
de los vuelos al alcance de casi todos y animaron a creer a los de
espíritu más incrédulo en nuestros pilotos.
Lo
sucedido refiere que en 1982 la Fuerza Aérea Argentina dispuso de
56 misiones de ataques que fueron cumplidas por aviones de combate
Skyhawk A-4B y A4C, Mirage M III y Dagger M 5, conjuntamente con
bombarderos Canberra MK 62.
Asimismo
la Fuerza Aérea tuvo la plena responsabilidad del control del
espacio aéreo y desarrolló: ataques a objetivos navales y
terrestres, transporte aéreo de tropas y víveres, mediante los
aviones KC 130 reaprovisionó en vuelo aviones de combate,
escoltó varios vuelos de aviones Super Etendard de la Armada en
arriesgadas y exitosas misiones, efectuó exploraciones y
reconocimientos, búsqueda y rescate, guiado y control de los
medios de la Fuerza Aérea, Armada y Ejército.
Por
otra parte, debe señalarse la intervención de la aviación
civil. Su apoyo constante demostró la magnitud del accionar
coordinado.
Al
evocar el 1º de mayo, la Institución anhela compartir con los
argentinos el reconocimiento institucional que se extiende no
sólo a los integrantes del arma, sino también a todos
aquellos que de alguna manera fueron protagonistas y que con su
participación o apoyo contribuyeron a afianzar la
soberanía de la Nación.
A
través de estos años la historia se ha encargado de plasmar cada
paso de los acontecimientos sucedidos en el conflicto del
Atlántico Sur. De allí se desprende la renovación y el
reconocimiento de la Fuerza Aérea Argentina para quienes
ofrendaron heroicamente su vida en la contienda.