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Mauricio
B. Bianchi |
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Que
como sociedad dejamos mucho que desear no es una novedad, que como
ciudadanos nos falta participación tampoco, que como electores
somos bastante desastrosos... menos... pero creo que es bueno que
hagamos un ejercicio regularmente que es más que saludable:
separar la paja del trigo o, dicho de otra forma, entender que
"no todo es igual", que "no todo es lo mismo".
Si... ya sé... a veces "la mayoría" es igual...
"la maoría" es lo mismo... pero "no todo"...
eso sería bueno que lo entendamos, que no está bien que paguen
"justos por pecadores".
No me pongo de ejemplo, no digo que siempre yo mismo haga ese
ejercicio, también cometo el error de "meter todo en la
misma bolsa"... pero en ocasiones, no siempre, es algo que,
como estoy convencido de que es así, trato de evitarlo.
Se me ocurrió hablar de esto luego de algunos sucesos mediáticos
que han servido para que en los medios se pongan a hablar de algo
que ya hace tiempo existe: el desprestigio de los medios, del
periodismo.
Al ver tanto cuestionamiento, incluso, aunque muchos no quieran
aceptarlo, tanta autocrítica (¿o acaso no son más bien los
mismos medios quienes "se analizan" a sí mismos o unos
a otros por estos días?) comencé a pensar si era todo tan asi,
si es todo tan malo.
Encima, en la inauguración de la Boulogne Sur Mer, el mismo
Intendente Ubieto cometió una generalización y me convenció
más del error en que incurrimos tantas veces.
Soy una persona que trata de no decir "todos los... son
iguales" y ponga allí la palabra que desee: políticos,
policías, jueces, carpinteros, maestros, bibliotecarios, etc.
Porque, lamentablemente tendemos a hacer esas absurdas
generalizaciones, tal como hizo Ubieto ese día cuando dijo que
ese acto de inauguración no saldría en ningún diario porque
todos se dedicaban a poner sólo malas noticias. En ese momento me
pregunté... ¿qué hago yo acá?. Si hago revistas y periódicos
y según escucho "ninguno" lo publicará.
Ese error de Ubieto no es más que una demostración de que hay
muchas cosas en las que fallamos como sociedad por conceptos que
tenemos muy arraigados. Seguramente Ubieto (lo he tomado de
ejemplo pero podría servirme casi cualquier argentino) estará
cansado de escuchar que "todos los políticos son
iguales" y más de una vez habrá pensado o dicho que no
debían ponerlo a él en "ese paquete".
Pues lo entiendo porque yo me sentí (y varios colegas que
estábamos ahí) metidos injustamente en un "paquete lleno de
disvalores" que, al menos yo, no tengo.
Ojo... luego tenemos que discutir si está mal contar las malas
noticias, si está mal investigar, etc. pero a lo que voy tan
sólo en esta ocasión es a que si "los propios
dirigentes" tienen ese tipo de expresiones y pensamientos que
uno cotidianamente ve en el almacenero, el industrial, el maestro
y el vecino entonces sigo afirmando que nuestros
"representantes" nos "representan" muy bien.
Deberíamos comenzar a "distinguir" lo bueno de lo malo,
lo correcto de lo incorrecto, lo legal de lo trucho, lo honesto de
los deshonesto, pero no sólo distinguirlo... debemos empezar a
"actuar" en función de ello. Para salir de esta crisis,
sin dudas tenemos que mejorar como sociedad. ¿Por qué no empezar
por no hacer generalizaciones?.
Mauricio
Bernardo Bianchi
mauriciobianchi@eldistrito.com.ar
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